domingo, abril 15, 2007

Consejo de juventud, democracia orgánica


La historia de la verruga Warner va mucho más allá de una simple gilipollez probablemente originaria de los esfuerzos neuronales de Pepiño Blanco. La verruga Warner es un caso categórico, y no anecdótico, de la calidad de la democracia española y de su sistema institucional.

El Consejo de Juventud anima a los jóvenes a alzar su voz, porque de lo contrario les saldrá una verruga. Bien. Enhorabuena por vuestra aportación, compañeros. No sabía que existiera un Consejo de Juventud. Veo, además, que sus máximos puestos directivos los ocupan dos sindicalistas y un socialista. Observo, por último, que parece llevar tropecientos años funcionando sin actividad conocida. Alzaré la voz, pues, para evitar la presencia de la verruga. La cuestión es: como joven que soy (todavía) ¿a mí me representan estos tipos?

España, y creo que esto es un caso especialmente notorio en el inmenso mar de burocracia que es Europa, está copada de entidades, asociaciones, consejos, comités y agencias representativas de los llamados sectores sociales que emiten opiniones, suscriben manifiestos, aplauden o censuran decisiones políticas, etcétera, arrogándose la supuesta portavocía de un cierto grupo de ciudadanos, sin que nadie les haya votado ni en muchos casos tenga conocimiento de su existencia.

Tenemos un montón de grupos supuestamente representativos que influyen en la elaboración de leyes o monopolizan opiniones; grupos que, en definitiva, son grupos de poder. Es una mezcla de despotismo ilustrado (todo para nuestro sector social representado pero sin pedirle opinión en ningún momento) y de democracia orgánica: cada colectivo humano tiene su comité que lo identifique. El consejo de juventud, la organización de consumidores, el sindicato de estudiantes, la cámara de comercio, hasta hay una federación de inmigrantes. En Cataluña el problema se agrava, ya que como hay que construír un país lo más parecido posible a España, aquí tenemos todas estas organizaciones por duplicado.

Parece ser que esta semana me van a ofrecer formar parte del cuerpo de burócratas del autodenominado Consell Nacional de Joventut de Catalunya. Pues va a aceptar su pastelera madre.